miércoles, 7 de noviembre de 2012

Recrucide – “Blood Divine” (2011)

Seis años tuvieron que pasar para que Recrucide nos dejara caer su segundo larga duración. Una carrera bastante entrecortada que ha perjudicado en cierta medida a esta gran banda nacional, en el sentido de que con los años de trayectoria debería tener una discografía más nutrida, pero bueno, el tema no es ese sino hablar un poco sobre este gran lanzamiento.

Con aproximadamente 49 minutos y 13 canciones, “Blood Divine” viene a saldar una deuda de varios años de espera y de buena forma, porque estamos presentes ante un disco bien producido, con buen sonido y buen formato, canciones bien armadas y que se resumen simplemente en un golpe duro al mentón. Un metal bastante pesado y que al no ser temas tan veloces como quizás algunos pueden esperar con excesos de blast beat ultrarápidos y asesinos en batería, hace que de alguna manera el sonido de cada canción te machaca más fuerte el cerebro. El disco de todas formas ya marca una línea en la banda, debido a que su disco anterior “Rebellion” ya tenía esta línea.

El disco comienza con “Death Confession”, donde comienza el demoledor sonido y muestra de Recrucide. Un tema que te deja claro inmediatamente cual es la línea del disco, debido a que a veces muchas bandas comienzan con intros suaves o armónicas, o a veces oscuras para después entrar en violentas ejecuciones. Recrucide en cambio toma el camino directo, demoledor desde el primer segundo. “Art Of Crime” es el tema que sigue y continúa el poderoso sonido, aunque en esta ocasión hay pequeñas variaciones en el tema que hacen poseer algunos quiebres en el sonido, riffs un poco más enganchadores. Esta canción fue la escogida pro la banda para ser single del disco y cuenta con su video promocional.

“Fresh Flesh” y “Carnage” mantienen la línea, directos, brutales pero melodiosos, donde cada tema te permite cabecearlo y degustarlo. “Dream Murder” es el quinto tema y es sin duda uno de los mejores del disco, comenzando como con una pequeña intro oscura y donde se nota después la gran creación musical de la banda, un tema muy completo, con varios cambios de ritmos, buenos solos de guitarra y te crea ese ambiente ideal donde uno termina diciendo “¡que buen tema!”.

“5 Seconds” y “Black Lamb” continúan de forma excelente. Hay discos en donde después de los primeros cortes se empiezan a desinflar, donde empiezan a salir esas canciones “de relleno”, pero la verdad es que acá eso no sucede, al contrario, la intensidad y calidad de cada canción hacen que cada track tenga vida propia. Luego la banda nos azota con otro gran tema que es “Demonia”, el cual es otro tema alto del disco a mi parecer, buen uso delos riffs melodiosos, medios tiempos y quiebres, un gran trabajo de Hernán “Herncide” Muñoz en los solos y buen trabajo de todos los músicos en general. Hasta acá 8 canciones que se te pasan volando y cuando eso sucede, es porque estas frente a buen disco. Es como cuando estás frente a la TV viendo un gran partido de fútbol, como si todo durara solo un par de minutos.

Luego se deja caer “Tyrano”, un buen tema pero que quizás se nota bajo, quizás debido al gran tema anterior, pero que por nada le doy un punto bajo, nada de eso, solo es un tema más directo y con menos juego compositivo que el resto. ¿El plus? El tema esta en español, y eso siempre se agradece. Casi pegado la banda nos sigue azotando con “Dominion”, buen tema donde destaco la buena ejecución de Cristian Medina en la batería.

A continuación aparece el tema once, “Candelabrvm”, un instrumental de guitarras limpias y sonido oscuro, que te da una pausa al disco de forma increíble. Un excelente instrumental, con gran atmósfera, el que nos da paso al tema que le da nombre al disco, “Blood Divine”, un tema que contiene la dosis ya característica, y que te dice que aún la masacre (en el buen sentido de la palabra) aún no termina.

El disco termina con otra gran canción, por lo que le suma otros puntos a esta producción. No hay cosa más agradable que un disco que termine con un temazo y “Blood Divine” lo hace, porque “Scars” es una canción increíble y que viene pegada al tema anterior pero que entra con un inicio atmosférico que seduce de inmediato, simplemente coronando todo, excelente trabajo musical donde cada instrumento luce, bellos quiebres de sonido, guitarras limpias entremedio, grandes solos, ufff... nada que decir, simplemente uno termina extasiado.

Debo reconocer que Recrucide es una de las bandas que me gusta de la escena nacional, los sigo desde ese primer gran demo “Neurotic” de 1994 y es una gran satisfacción que pese a varios problemas y años de silencio sigan adelante, y lo mejor de todo... lanzando buenos discos. “Rebellion” fue el primer paso y “Blood Divine” confirma el buen pie en la que se encuentra Recrucide. A destacar debo decir que es un disco muy bien armado, con los temas bien ordenados que hacen que no pierdas interés alguno; canciones de buena duración, justos y precisos; cada músico realmente hizo un trabajo increíble, quizás varios hagan sobresalir a Cristian en batería y a Hernán en guitarra, pero la verdad es que se nota un muy buen trabajo en equipo y donde ninguno desentona. Un disco que tiene un muy buen sonido, buena producción, por lo que siempre también se agradece que las bandas tengan este nivel de profesionalismo. ¿A qué suena Recrucide? A nada en particular, no es algo que yo quiera encasillar, es death metal si, pero ten entrega algo más, y eso es lo lindo de que una banda entregue un sello, que cuando los escuches digas “ahhh, si, es Recrucide sin duda”.

Como con todo disco nacional, hágase un favor y compre el disco, disfrútelo y apoye a quienes se sacan la cresta por entregar un buen trabajo en un país tan competitivo musicalmente debido a lo pequeño que somos, pero que trabajos como estos sobresalen y que terminan solamente engrandeciendo nuestro Metal. Solo espero que la banda nos siga entregando tan buen material y por muchos años más... y más seguido!


1 comentario:

Anónimo dijo...

Ese disco es la caga misma...